Fondo de Emergencias: ¿Para qué?

¿Por qué tener un Fondo de Emergencias?

La Vida es Azar, ¿estamos claros de eso? No controlamos aquello que sucede en nuestro día a día, más allá de:
a) Nuestro pensamiento;
b) Nuestras palabras;
c) Nuestras acciones.
Es decir, fuera de esta pequeña esfera de cosas, no hay mucho que podamos controlar realmente: No sabemos si el día de hoy nuestro vecino nos saludará amablemente o siquiera si estará para saludarnos, también ignoramos cómo se desarrollara nuestro día al detalle; conocemos la rutina, pero hasta ahí… Mucho menos sabemos si habrá un crack bursátil o si el peso se fortalezca ante el dólar, etc.

Dicho lo anterior, no estaría mal contar con cierto margen de operación en la toma de nuestras decisiones, ¿verdad? Es decir, a todos nos sentaría de maravilla tener un colchón en muchos aspectos relacionados con la incertidumbre. Lo ideal sería un botón de “Reinicio” para recomenzar el día, ahora sí, sabiendo lo que vendría; y quizá nos evitaríamos ese café derramado, o haber tomado la vuelta equivocada por no ir poniendo atención… ¿Quién sabe? Algunos más ambiciosos, seguramente se ganarían la lotería o apostarían en eventos deportivos…

En fin, la idea es: ¿No estaría mal tener un poco (aunque fuera solo un poco) de espacio para poder decidir de mejor manera, sin vivir al momento…
Imaginemos que hubo un accidente de automóviles en el recorrido que usas para transitar a tu trabajo y, ya te vi maldiciendo: “¡Rayos! Ahí va mi bono de puntualidad, que en paz descanse…”
Pero, pensemos de nuevo… ¿Y si siempre salieras con unos, digamos, 20 minutos de antelación? Por que justamente, sabes que algo podría suceder, la ciudad está sobrepoblada y nunca falta(n) un despistado (o dos).

Psicología: ...Atención...

Quizá ante esta situación podrías tomarlo con más calma y alcanzarías a llegar.

Otro ejemplo: Necesitas avisar un recado de forma urgente pero, no tienes línea en tu celular, es más, no tienes saldo. Sabes que la modernidad es ahora, así que en la cartera solamente llevas tus tarjetas (y eso porque no todos aceptan CoDi) y ni un billete de $200.00. Encuentras una máquina de teléfono, pero ya sabemos hacia donde va esto: Nada.

Esto también nos puede suceder en el manejo de nuestras finanzas personales, los imprevistos no son cosa exclusiva de nimiedades o retardos, puede pasar un accidente de gravedad, o quizá una enfermedad o una situación inesperada que afecte tus finanzas inmediatas (un despido injustificado).

Y cuando esto sucede, ¿cuál suele ser la mejor solución que, en general, tenemos para ofrecer? Pues sí, ¡¡el tarjetazo!! Es decir, utilizar una tarjeta de crédito para disponer de dinero que no es tuyo y del que, muy posiblemente (dado que desconoces esta herramienta), terminarás pagando de más.

No dar el tarjetazo" ante nueva alza en tasas de interés ...
Tarjetazo: Acción de recurrir a un crédito para solventar una necesidad imprevista

Una práctica muy grave, y que se encuentra en la mayoría de los mexicanos, la sabiduría popular dice que las tarjetas de crédito “se guardan solo para emergencias“… ¡Madre mía!, están muy, pero en serio que muy equivocados (lo veremos en otro momento…)

Entonces tenemos que ante una situación imprevista, y por lo tanto estresante, tomamos una pésima decisión financiera que nos costará dinero y sobre el cuál, en el momento que lo realizamos, no tenemos ni la forma ni la claridad mental para pensar sobre cómo lo pagaremos (Dios dirá o Dios provea, según lo prefieras).

¿Por qué no anticiparnos? Al igual que con el primer ejemplo del tráfico en la ciudad: ¿por qué no tener un “guardadito“? Sabemos que eventualmente podría llegar esta situación (tocamos madera) y, para el caso de que no llegase a suceder, siempre tendrás un excedente: Recuerda que, como dice el refrán, siempre es mejor que sobre a que falte.

Tipos de Atención – psi121f
Cómo prepararte financieramente para cualquier imprevisto ...

Y por esa razón es especialmente importante tener un Fondo de Emergencias previamente constituido, lo que nos va a permitir poderle hacer frente de la manera correcta a cualquier eventualidad financiera.

Pongamos por ejemplo que un cercano tuyo (pareja, familiar o incluso el pequeño Timmy bastaría) ha caído enfermo, y el tratamiento médico es caro como nunca lo hubieras creído posible.
Bueno, desafortunadamente, si eres como el 90% de los mexicanos podemos adivinar que no tienes seguro médico contratado (solo uno de cada 10 mexicanos cuentan con ello) y, sabemos que el IMSS o el ISSSTE en su defecto tardarán solamente para admitirlo a trámite.
¿Qué harás?

Tristemente tus opciones se han cortado y solamente te queda dar el tarjetazo, pero… ¿te imaginas haber tenido una buena cantidad de dinero a la mano para enfrentar esta situación? Ya no tendrías que preocuparte más que por la salud de tu familiar (que es la prioridad, ante todo)

En nuestra siguiente entrada te hablaremos sobre cómo se debe de integrar un Fondo de Emergencias

CUIDANDO TUS FINANZAS

por Miguel A. Caloca, CEO Godín Financiero

Ahora, si te ha parecido interesante este tema, también podrías visitar nuestra entrada acerca de la Opcionalidad, un concepto que viene directamente relacionado con los motivos por los que debes de tener un Fondo de Emergencias, puedes consultarlo en el link a continuación:

2 Replies to “Fondo de Emergencias: ¿Para qué?”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *