Responsabilidad Financiera

Al despertar suelo pensar en lo que el día de hoy va a depararme, me gusta analizar algunos posibles escenarios -algunos bastante probables y otros tantos producto de mi imaginación más desbaratada-, desde lo mejor de lo mejor como cobrar los intereses de una buena decisión financiera en la Bolsa hasta lo más disparatado: ¿qué pasaría si el día de hoy quebrara X empresa donde mantengo una reserva de capital considerable (mayor al 10% de mi Presupuesto Total)? Y, en todo caso, ¿de quién sería la culpa?

¡Condenado gobierno! ya me escucho decir o quizá fue culpa del agente que, teniendo un incentivo económico (comisiones por venta, les dicen) para ocultarme información valiosa, decidió hacerlo. O la misma compañía, que temerosa de una súbita fuga de capital, ha decidido “maquillar” un poco, ¡pero que no ha sido mucho!, solo un poquito sus estados financieros y las problemáticas, escondiendo sus verdaderas problemáticas detrás de comunicados genéricos y entrevistas sin sentido.

Si quieres paz, prepárate para la guerra
Parabellum

Pero no, al final del día existe un principal culpable, y eres tú. Sorpresa, sorpresa. Sea el caso que sea, no fuiste obligado a firmar. Y, como diría John Wick (Keanu Reeves) en Parabellum, y que buen título para una película y la analogía que presentamos porque, lo queramos ver o no, allá afuera se está llevando a cabo una guerra sin cuartel por distintas compañías que buscan arrebatar el dinero de nuestros bolsillos.
No hay mucha ética detrás de ello, en verdad que no: necesidades de productos creadas, malos hábitos de consumo fomentados, echar mano a estrategias de dudosa autenticidad para referir y captar recursos (¿recuerdas al agente de hace unos párrafos?)

Y entonces termina mi ejercicio de imaginación y vengo cayendo en cuenta de la Primera Regla del Dinero, ¿la recuerdas? “Si yo no cuido de mi dinero, no puedo esperar que alguien más cuide de él”. Entonces, en el hipotético ejemplo, fue mi culpa, siempre: Por no hacer un proceso de debida diligencia antes de meter mi dinero ahí, por dejarme llevar de mis deseos inmediatos y subestimar la importancia de mis metas en el largo plazo, por confiar “a ciegas” en la palabra de un amigo sin más, por no tener la entereza para negarme a una oferta que parecía “demasiado buena”, etc., etc., etc.

La lista continúa ad infinitum y es que el dinero, casi tanto como la vida no se trata de un tema de administración, sino de -¡y anótalo bien!- prioridades.
¿Dónde estás? y ¿qué es lo que buscas?/¿hacia dónde te diriges?, son las que yo considero como las dos preguntas clave por resolver para tener una existencia con sentido. Pero tenemos todavía una pregunta tan o más importante: ¿qué estás dispuesto a pagar para llegar a dónde dices que anhelas estar en unos años?

Esto es algo que aprendí en el alto rendimiento: Aunque todos suspiran por estar en el podio, pocos aspiran lo necesario para llegar. Por ello la tajante distinción entre lo que dices que anhelas y el anhelo de cumplir en realidad: Es sencillo decir que queremos una mejor vida, ganancias en las inversiones o un cuerpo más atlético, pero no resulta tan fácil transformar nuestros hábitos, hacer de nuestra educación financiera una prioridad, ni tampoco ir al gimnasio y comer de forma sana.
La Congruencia es un aspecto clave para la vida, aprender a confiar en las acciones antes que en los dichos. Por que, hablar no cuesta nada (hasta la persona más tacaña suele regalar consejos), pero… ¿¡actuar!?, ¡vaya que es complicado!

Ο χρήστης gustavo gavassa στο Twitter: "Detras de todo exito hay trabajo,  talento, esfuerzo y planificacion. Los logros no suceden por casualidad  sino por causalidad. Aprovechando los #YOG2018 siempre es bueno recordarlo  ! @

Y más complicado aún resulta, el ejercicio de actuar congruentemente durante largos periodos de tiempo, pero, ¿de dónde más creemos que vienen los grandes resultados? Grábalo en tu memoria (y en tu cartera, si es posible) de forma permanente: Nada que valga la pena ha sido logrado jamás sin esfuerzo alguno.

Por que somos muchos los que anhelan llegar (no conozco a nadie que, entendiendo lo que significa, se niegue a la idea de tener Libertad Financiera), pero muy pocos están dispuestos a trabajar con todo lo que ello implica. ¿Qué sucede con los deportistas? Que nos maravillan todos los días con sus hazañas, pero sabemos que es el resultado de un esfuerzo que realizan diariamente.

La Responsabilidad Financiera es ese ejercicio de congruencia, de todos los días comenzar a acercarte aunque sea un paso más a tus metas (los centímetros hacen metros y estos kilómetros), de actuar conscientemente respecto de tus cometidos, de desafiar a las fuerzas que se oponen a tu objetivo a largo plazo, algunos ejemplos de estos enemigos: la gratificación inmediata, el pensamiento sesgado, la presión social (gregarismo), ¡tus propias emociones!
Y, aunque me gustaría demasiado, la verdad es que no seremos tan estoicos como amerita el asunto para este artículo, por cuanto que solamente busco que seas consciente de un único e irrefrenable hecho: que culpar a las circunstancias, no te hará superarlas.

La Responsabilidad Financiera te hará ahorrar ese 10% de tus ingresos sin titubear, podría hacerte estirar hasta el 40 o el 70 ¡e inclusive el 80%! (depende de las circunstancias).
La Responsabilidad Financiera te ayudará a invertir en tu educación financiera y a filtrar el contenido que consumes por encima de otros estándares que su popularidad.
La Responsabilidad Financiera te convencerá de desconfiar de quienes piden tu dinero, y por ello mismo harás un proceso de investigación antes de darles un centavo siquiera.
La Responsabilidad Financiera te obligará a abrir los ojos respecto de una realidad incómoda: Si no estás en donde quieres, posiblemente, tú seas la persona más responsable de ello.

Pero, ¡oye!, que no todo son malas noticias, si tú eres la persona responsable de estar donde no quieres, ¿adivina quién te puede sacar adelante? …

CUIDANDO TUS FINANZAS

por Miguel A. Caloca, Socio Fundador de Godín Financiero

4 Replies to “Responsabilidad Financiera”

  1. It’s a shame you don’t have a donate button! I’d
    without a doubt donate to this excellent blog! I suppose for now
    i’ll settle for bookmarking and adding your RSS feed to my Google account.
    I look forward to new updates and will share this website with my Facebook group.
    Talk soon!

  2. Howdy I am so excited I found your blog, I really found you by accident,
    while I was searching on Digg for something else, Nonetheless I am here now and
    would just like to say thank you for a tremendous post and a all round exciting blog
    (I also love the theme/design), I don’t have time to
    read through it all at the moment but I have book-marked it and also added your RSS
    feeds, so when I have time I will be back to read more,
    Please do keep up the awesome work.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *