Tiende tu Cama y otros pequeños hábitos que cambiarán tu vida y el mundo es un pequeño libro con una fórmula tan sencilla como poderosa. En este Análisis de Lectura te explicaré por qué motivo se trata de uno de mis libros favoritos. ¡Vamos con ello!
por Miguel A. Caloca, Fundador de Godín Financiero.
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Tiende tu cama y otros pequeños hábitos que cambiarán tu vida y el mundo (en adelante, “Tiende tu Cama”) es uno de esos pocos libros que guardan el potencial de realmente cumplir con lo que su título promete. Aún recuerdo haber sido escéptico para la primera vez que lo adquirí (me llamó la atención su título) y haber pensado, ¿cómo puede esto cambiar mi vida?
Sin embargo, debo confesarte que, para una primera lectura, el libro me ayudó bastante y ocasionalmente termino volviendo a este para efectos de repasar dos que tres cuestiones que me llamaron la atención en ese momento (y aún lo hacen).
Cabe mencionar que leí este libro hace algunos años (su publicación en México fue hacia el 2017) y me pareció bastante entretenido aunque esto fue antes de saber que se basaba en una plática que el autor había dado hacia el 2014 en la Universidad de Texas. De esto hablaremos más adelante…
En fin, me parece que este libro cumple con la fórmula básica que tantos autores fracasan al intentar conseguir: Simpleza + Pragmatismo. Haciendo uso inconsciente -o no- de historias para ejemplificar conceptos y su aplicación (lo que hoy se dice storytelling o narración de historias), el autor nos lleva de un capítulo a otro en forma dinámica. También tiene cierto grado de “morbo” el saber que se nos abre la ventana indirecta a lo que es el trenamiento de la fuerza armada de los Estados Unidos de América, específicamente, de los famosos navy seals.
La suma de estos factores genera un libro entretenido en principio y bastante conocido a nivel general. Cumple con las expectativas y deja dos que tres reflexiones interesantes entre sus páginas, mismas que trataré con mayor profundidad en este análisis de lectura.
Si te interesa adquirir el libro, puedes hacerlo a través de este enlace.
¿Quién es William McRaven y por qué leer «Tiende tu Cama»?
Lo que ya te decía, William H. McRaven es un americano que formó parte del cuerpo de élite de la marina norteamericana, los navy seals. De esta forma, el libro de Tiende tu Cama se centra en compartir diez lecciones que recibió durante su entrenamiento y formación, así como la forma en que también nosotros lo podemos aplicar día con día.
Ahora que, si piensas que se trata “únicamente de un navy seal“, no podrías estar más errado/a. Pues su carrera militar no se queda por detrás:
- En el 2003 realizó la operación Task Force 121, que desembocaría en la localización y captura efectiva de Saddam Hussein (entonces considerado como la persona más buscada del mundo);
- Intervino en el rescate del capitán Richard Phillips cuando un grupo de piratas somalíes ingresaron al buque portacontenedores Maersk Alabama (hecho real en que está basado la película Capitán Phillips, con la actuación de Tom Hanks);
- Creó el plan de ataque para lograr detener a Osama Bin Laden (suceso que también se llevó a la pantalla grande a través de la cinta Zero Dark Thirty).
A raíz de su reconocimiento y prestigio fue que en el año 2014, la Universidad de Texas invitó al militar -jubilado en ese mismo año- a dar el discurso de graduación para la generación de ese año. Fue este discurso en que el marine retirado compartió diez lecciones de vida que aprendió durante su formación como SEAL. Dicho discurso se convirtió inesperadamente en un fenómeno viral al alcanzar más de cien millones de vistas en YouTube, y de ahí que aquí tengamos este libro. Bendito capitalismo, a que sí…
INTRODUCCIÓN AL LIBRO TIENDE TU CAMA: UN DISCURSO DE VIDA
El libro de Tiende tu Cama maneja, mediante un lenguaje sencillo y que va directo al grano, parte del conocimiento que McRaven ha aprendido en sus más de 30 años de servicio, tomando como ejemplo momentos cruciales en su carrera para ello.
Algún tiempo después algunas personas siguen preguntándose el por qué detrás de la viralidad del discurso de un militar (que confesó estar nervioso por recibir a un público posiblemente hostil, aunque sabemos que no fue así) en su alma máter. La respuesta no puede resultar más sencilla: Las lecciones compartidas se relacionan con los desafíos de la vida y son aplicables a cualquier persona sin distinción alguna.
Tiende tu Cama y empieza el día
El nombre del capítulo primero del libro Tiende tu Cama es en realidad Empieza tu día con una tarea cumplida. Para ello, el autor nos explica como todas las mañanas debían comenzar con una cama impecable. Y no, no es una exageración. Pues según la descripción que realiza el autor tenemos un camastro escueto y unos cuarteles austeros. En el cual deben encontrarse en perfecto orden los siguientes elementos:
- Una sábana que cubre el colchón, sobre la que debe haber otra más:
- Otra cobija de lana gris firmemente metida bajo el colchón;
- Una segunda cobija doblada a la perfección formando un rectángulo a los pies de la cama;
- Una única almohada elaborada por la asociación de ciegos Lighthouse for the Blind. Que debe encontrarse al centro de la parte superior del camastro en un ángulo de 90 grados con la cobija de la parte inferior.
Cualquier desviación de la norma sería castigada con un ejercicio tan incómodo como indeseable, lo que ellos conocen como “tirarse a las olas” y “convertirse en una galleta” (que veremos más adelante). Esto consistía en arrojarse a las frías aguas de la playa y revolcarse hasta terminar cubierto de los pies a la cabeza por arena. Esto ultimo se llamaba “galleta azucarada”, puntos por creativos.
Después de una serie de inspecciones bastante minciosas, el inspector realiza la prueba final rebotando una moneda de un cuarto de dólar (25 centavos) en la cama. Si esta bota con fuerza suficiente para volverla a tomar en el aire, entonces es que lo has hecho bien; si no, pues…
El autor comparte como no existía ninguna recompensa por el acto de tender bien su cama. Ningún elogio, cumplido, aplauso o sonrisa, simplemente se asiente con la cabeza y se continúa con la orden del día. Puesto que hacer la cama de la forma correcta era únicamente algo que se esperaba de todos, tan sencillo como eso.
Constituía la primer tarea del día y como tal, era extremadamente importante. Pues denotaba la atención al detalle y, al final del día, sería un recordatorio de que algo se había hecho bien en el día. Independientemente de lo mal que pudiera salir el resto de la bitácora/orden del día, ya tenías tu primer punto recién empezando.
Ahora, cabe mencionar que el tema de tender tu cama ya lo han tratado antes autores como Tim Ferriss, Brian Tracy y hasta Ramit Sethi. El concepto que engloba es el de «quick wins» o ganancias rápidas. Y lo que pretende enmarcar/resaltar es el entendimiento de que la vida es difícil y habrá ocasiones en que podamos hacer poco o nada para incidir en el resultado de eventos que nos afectan…
Sin embargo, es importante poderte motivar con algo (aunque sea mínimo) día tras día. A decir del autor:
Nada puede reemplazar la fuerza y el solaz de la propia fe. Pero, a veces, el simple acto de tender la cama puede darte el impulso que necesitas para comenzar tu día, y proporcionarte la satisfacción necesaria para darle un final adecuado.
William H. McRaven
Encuentra alguien que te ayude a remar
Uno de los aspectos básicos que toca Tiende tu Cama y por los que pasa la formación militar -y algo necesario para cualquiera– es el remarcar la importancia del trabajo en equipo. En el libro Tiende tu Cama se nos comparte que para transmitir esa lección a los “renacuajos” en espera de transformarse en “hombres rana” de la Marina se utilizaba una balsa de goma de tres metros de largo.
La dinámica es bastante sencilla: Donde quiera que fueran -durante la primer etapa del entrenamiento-, debían llevar esa balsa consigo. Esto no admitía situaciones de excepción. Por lo que, si un tripulante estaba agotado o enfermo, el resto dele quipo debía hacer lo mejor posible por cubrirlo.
En estos momentos, el resto del equipo -compuesto por 7 integrantes- remaba con más fuerza, cavaban con mayor profundidad e inclusive le cedían sus raciones de alimento al elemento enfermo para fortalecer sus defensas (seguro que te suena si conoces Naruto…).
Obvio que, llegado el caso en que fuera otro elemento que estuviera indispuesto, ahora era tú turno de hacer los honores: Reciprocidad, pura y dura.
Esa balsa de goma les hizo darse cuenta de que nadie podría sobrevivir al entrenamiento sin ayuda.. Así como ninguno de nosotros puede sobrevivir a todas sus batallas afrontándolas en solitario. Es decir, en tu vida, necesitas de personas que te apoyen en los momentos difíciles (y a su vez, tú apoyarlos en sus momentos difíciles).
Para ejemplificar la acción de este principio, el autor nos relata sobre un accidente de paracaídas que tuvo, en el que su pelvis se desgarró 12 centímetros y el impacto de una caída precipitada (tras haberse enredado con su paracaídas) lo dejó en malas condiciones físicas. Esto al punto de que el autor confiesa haber pensado en que había llegado al retiro, el punto final de su carrera.
Sin embargo, comparte como su esposa le apoyo en todo momento. No solo curando sus heridas, alimentándolo y apoyándole con la bacinica; sino, sobretodo, recordándole quien era él. Al decirle que a lo largo de su vida jamás se había rendido en nada y no iba a comenzar ahora (algo cliché, si gustan…).
De esta forma, al negarle sumirse en la autocompasión, este amor del tipo “mano dura” comenzó a ayudarlo a mejorar. El efecto aumentó exponencialmente cuando jefes, familiares, amistades y conocidos fueron a verlo. Posteriormente, nos indica como un gran apoyo (y sin duda lo es) en su vida fue que otras personas tuvieran fe en sus capacidades, viendo algo que otros no habían vislumbrado.
Recuerda, nadie está a salvo de la tragedia. Esto es una dura verdad de la vida. Pero, al igual que con la pequeña balsa, tanto mejor será si enfrentamos esas adversidades con un equipo de seres queridos que si pretendemos hacerlo en solitario: No puedes darte el lujo de remar en solitario.
Encuentra a alguien con quien compartir tu vida, haz tantos amigos como puedas y nunca olvides que tu éxito depende -en gran medida- de los demás. De quienes te acompañan y están contigo… Aprovecho este momento para agradecerte a ti que lees este artículo, pues me acompañas en esta trayectoria tan llena de aprendizaje, ¡gracias!
Mide a las personas por el tamaño de su corazón
Puesto fácil y dicho en otras palabras, no hay que juzgar al libro por la portada (incluye a Tiende tu Cama, jeje).
Amén del ejemplo que nos da el autor, en que un inspector le pide a un hombre de baja estatura que “le demuestre que está equivocado” (al pensar que no lo logrará). Debo confesar que este capítulo en específico me recuerda bastante al argumento de la película de 1992 titulada Cuestión de Honor (en cita dentro de la imagen derecha).
Por parte del autor, nos platica como en alguna ocasión (durante sus tiempos universitarios) se dirigió a hablar con el teniente Douglas Houth sobre su experiencia en Vietnam y lo que se podría esperar en el caso de terminar su servicio militar. Mientras esperaba, se puso a ver las fotografías de los hombres condecorados, entre los que encontró una multitud de hombres de aspecto fornido y mirada penetrante.
Al mismo tiempo observó como otra persona miraba esas fotografías. A juzgar por su manera de vestir al momento, su complexión delgada y baja estatura, asumió que se trataba de un civil. Pensando incluso en cómo alguien podría engañar así a esta persona que miraba las fotografías: El entrenamiento seguramente lo destruiría.
Pues bien, cuál no fue la sorpresa del autor de Tiende tu Cama cuando Douglas Houth lo presentó como Tommy Norris, el último SEAL al que habían galardonado -por aquel entonces- con la Medalla de Honor por su servicio en Vietnam. Para que te des una idea, aquí te comparto una fotografía de Thomas R. Norris (a la derecha):
Cual no fue la sorpresa de McRaven al saber que ese hombre pálido y delgado, del que él dudaba apenas segundos antes que pudiera ser capaz de soportar el entrenamiento SEAL, era el teniente Tom Norris. Aquel que había combatido en Vietnam y se abrió paso entre líneas enemigas durante varias noches para rescatar a dos aviadores derribados.
Cierra el capítulo con una bella frase:
Lo que cuenta no es el tamaño de tus aletas, solo el tamaño de tu corazón
Olvida que fuiste una galleta azucarada y sigue con tu vida
El título original del capítulo es La vida no es justa, ¡sigue adelante! y, aunque estaba tentado de mantenerlo así… Sencillamente no puedo dejar pasar el papel protagónico de la galleta azucarada en esta historia.
Este es uno de mis capítulos favoritos del libro, y considero que cualquier millenial/centennial debería de leerlo a consciencia al menos una vez. Y bueno, a todo esto, ¿qué es una galleta azucarada? (el término en inglés es sugar cookie)
Pues mira que con el término “galleta azucarada” se refieren al movimiento por el cual los postulantes deben dejarse caer sobre la arena húmeda y revolcarse de un lado a otro hasta que cubran todo su uniforme. Como seguro anticipas, no es algo muy cómodo que digamos… Para prueba te comparto la imagen que está a la derecha, con distintos militares que están siendo “galletas azucaradas”.
La técnica de las galletas azucaradas no es la práctica más dolorosa y extenuante del entrenamiento que lleva a cabo un navy SEAL, ¡pero vaya que es incómoda! Cualquiera que alguna vez haya tenido una situación similar en la playa seguro que lo entiende.
Ahora, el punto de este capítulo es expresarnos que la designación de este castigo era por completo arbitraria por parte de los superiores. Podías hacerlo todo bien e igual terminar siendo un mazapán bañado en arena ríspida. Algo que resultaba especialmente difícil de aspirar para los aspirantes a SEAL. Pues podrías dar tu máximo esfuerzo solo para recibir una orden de “hacerte una galleta azucarada” en vez de una felicitación o siquiera un gesto mínimo de asentimiento. La vida es dura.
Tal como lo refleja el breve intercambio que nuestro autor mantuvo con su teniente Philipp L. Martin aka “Moki”, transcrito a continuación:
P – Señor Mac, ¿tiene usted alguna idea de la razón por la que acaba de convertirse en una galleta azucarada esta bella mañana?
M – No, señor Martin.
P – Por que, señor Mac, la vida no es justa y mientras más rápido lo averigüe, mejor le irá.
De hecho, el autor comparte que algunos meses después el teniente Moki sufrió un accidente de bicicleta. El accidente le dejó en estado paralítico y no fue más que una manifestación de increíble mala fortuna hacia su persona. Sin embargo nunca se le escuchó quejarse al respecto. Mas bien, se convirtió en un buen pintor e inauguró el triatlón Superfrog que se lleva a cabo cada año en Coronado.
La filosofía condensada del capítulo cabe en una frase, que te comparto a continuación:
Es fácil responsabilizar a alguna fuerza externa por lo que te toca en la vida y dejar de esforzarte porque crees que el destino está en tu contra. Es fácil pensar que el sitio donde creciste, la manera en que te trataron tus padres o la escuela a la que asististe son todo lo que determina tu futuro. Nada podría estar más alejado de la verdad.
Este capítulo del libro Tiende tu cama habla de que es fácil buscar culpables y nunca tomar responsabilidad. O de quedarnos «llorando por la leche derramada». Lo que no es fácil es dejar las tragedias atrás y seguir adelante. Tenemos que entender que, a veces, sin importar cuanto te esfuerces o lo bueno que seas, terminarás convirtiéndote en una galleta azucarada. Así funciona el mundo. Punto.
Si pudiera resumir este capítulo en dos palabras, serían las siguientes: Shit happens.
No temas al circo
El “circo” es la forma en que los SEAL denominan a una sesión extraordinaria de entrenamiento. Se trata de dos horas adicionales de calistenia, combinada con el hostigamiento constante y su misión es que solo los más fuertes (en términos de voluntad) sobrevivan al entrenamiento.
El motivo por el cual se teme al circo es que va más allá del sufrimiento adicional. Se trata de la certeza de que la carga de trabajo adicional generará cansancio y fatiga, de tal forma que no podrás satisfacer los criterios del día siguiente. Entrando así en un círculo vicioso. El autor de Tiende tu Cama lo define como “una espiral de muerte“, una cadena de fracasos que provocaba que los aspirantes salieran al por mayor una vez habiendo ingresado a la Lista del Circo.
Este ejemplo nos habla de resiliencia y voluntad. Sobre el coraje necesario para afrontar los retos más fieros que la vida tenga para ofrecer. Como escribe el autor:
En tu vida te enfrentarás a una variedad de circos. Tendrás que pagar por tus fracasos. Pero, si perseveras, si permites que esos fracasos te sirvan de lección y te fortalezcan… Entonces estarás en mejores condiciones para enfrentarte a los momentos más difíciles de tu vida.
Este es sin duda uno de los problemas más apremiantes en tiempos modernos. Pues el mundo real y el sistema educativo en su conjunto nos impiden aprender a fracasar. Se nos enseña a temer al fracaso, al error, a la creatividad. Antes que enseñarnos que los fracasos son tan inevitables como cierto personaje de color morado que habitó en el MCU, se nos castiga si cometemos el mínimo error. Tal como lo expresa la siguiente imagen, tomada de nuestro Instagram:
No se entiende que la naturaleza del ser humano es perfectible antes que perfecta. Esto significa que claro que cometeremos errores pero también significa que podemos aprender de ellos y mejorar cada ocasión posterior. A esto se le llama Experiencia.
Tenemos que aprender a fracasar rápido y no quedarnos traumados con ello. Simplemente seguir adelante. Pero, tristemente, esto es algo que no nos enseñan en la escuela (de lo que ya he escrito antes, puedes leerlo aquí). Tendríamos que verlo un poco más como Thomas Alva Edison, autor de la célebre frase que comparto a continuación:
No fracasé, solo descubrí 999 maneras de cómo no hacer una bombilla.
Thomas A. Edison, inventor de la bombilla incandescente
Y sí, lo terminó logrando. Aquí otra frase del mismo autor que me encanta en demasía:
¿La lección?, es sencilla: Cada fracaso te hace más fuerte. Como el propio autor lo expresa:
Los verdaderos líderes aprenden de sus fracasos, utilizan estas lecciones para motivarse a sí mismos y no temen volver a intentarlo ni tomar la siguiente decisión difícil.
Recuerda que una vida plena está llena de conversaciones incómodas.
Otro libro que podría ayudarte a fortalecer este tema es El Obstáculo es el Camino (puedes adquirirlo en este enlace) del autor Ryan Holiday. Pero, como diría Ryan Holiday, está en nosotros encontrar de cada tragedia, crisis u obstáculo una manera e salir adelante, y el lado positivo de esto.
Finalmente, te dejo con la letra de una canción que seguro te puede inspirar para salir adelante. Es de la pelicula La Familia del Futuro de Disney, ¡seguro la conoces!
Deslízate de cabeza por el obstáculo
Este capítulo del libro Tiende tu Cama nos comparte una enseñanza básica de vida: Debemos tomar riesgos (calculados si gustas, pero riesgos). No arriesgar es una manera de garantizar la mediocridad.
Esto lo entiende McRaven cuando se sorprende por la forma en que se ha batido un récord de resistencia. Al preguntar quién y cómo se había logrado, entonces el teniente le responde que el aspirante “se había aventado de cabeza abajo”. Antes que elegir bajar como todos los demás…
Dicho a manera de resumen tenemos la siguiente frase tomada del libro (y que me gusta bastante):
La vida es una contienda y el potencial de fracaso está siempre presente, pero aquellos que viven con temor al fracaso, alas dificultades o a la vergüenza, jamás alcanzarán su máximo potencial.
Por cierto que, este capítulo me recuerda un poco a las enseñanzas detrás del Primer Axioma Mayor en el libro Los Axiomas de Zurich, por el autor Max Gunther. En este se explica cómo debemos siempre invertir una cantidad que resulte significativa. Que tenga el potencial de cambiar nuestra vida si todo va bien pero no nos deje en bancarrota si las cosas nos son adversas. Esto es, la definición clásica de una Asimetría Positiva.
Por cierto, ya tenemos publicado el Análisis de Lectura de ese libro (te recomiendo leerlo), sigue este enlace si es de tu interés.
No te acobardes frente a los tiburones
Este es un capítulo tanto demasiado motivacional. Su título formal es “Enfréntate a los bravucones“. En términos generales habla sobre cómo debes ponerle un alto a terceros que buscan intimidarte, con una analogía al ataque sorpresa de los tiburones.
Aunque un tanto trillado, el capítulo se deja varias frases excelentes entre las que destaco la siguiente:
Si no tienes valor, entonces otros pueden definir tu destino y estás a merced de las tentaciones de la vida.
Este capítulo podría resumirse fácilmente en la frase que reza que “el valiente vive hasta que el cobarde muere”…
Sé la mejor versión de ti mismo en los momentos más oscuros
Debo comenzar confesando que me encanta el título del Capítulo como “Ponte a la altura de las circunstancias” porque es cierto. Si quieres subir, necesitas demostrar que estás a la altura.
En esta ocasión el autor nos comparte lo que sería la culminación de su fase de buceo en el entrenamiento de los SEAL: Una misión consistente en recorrer a nado subacuático dos kilómetros desde la bahía de San Diego hasta un buque anclado del otro lado. Una vez bajo la embarcación, habría que colocar una mina lapa de práctica en la quilla y regresar sin ser detectados.
¿El problema? Un campo de visión tan reducido y oscuro que era prácticamente imposible ver nada. Finalmente, lo logró.
El asunto de este capítulo es más motivacional que otra cosa pero toca una cuestión esencial para cualquiera de nosotros: La Responsabilidad inherente que existe tras la expresión “estar a la altura”. No te miento que una de mis expresiones favoritas en el idioma inglés es justamente step up.
Tienes que entenderlo. La vida es cambiante, los desafíos son mayores. ¿Estarás a la altura o te dejarás vencer por las circunstancias?
Canta cuando el lodo te llegue al cuello
A veces todo lo que hace falta en nuestra vida es un poco de actitud. Quizá te suene algo cliché -porque lo es-, pero funciona.
En esta ocasión McRaven nos habla de lo que se conoce como el miércoles de la semana del infierno, el buen McRaven y su equipo estaban sumergidos hasta el cuello en los lodazales del Río Tijuana. La semana del infierno era el evento definitivo en la primer fase del entrenamiento SEAL. Constando de seis días completos de no dormir y hostigamiento por los instructores: Carreras interminables, recorridos a mar abierto, pistas de obstáculos, escaladas con cuerda, calistenia y la balsa de goma que ya conocimos en el Capítulo 2…
El propósito de esta “Semana del Infierno” era eliminar a los débiles (así como las correcciones de mercado, jaja). En términos estadísticos -nos comparte McRaven- es mucho mayor el índice de abandono durante la semana del infierno, siendo su punto más difícil el de los lodazales.
Se les agota en el término medio de la semana y se les deja en los fríos lodazales durante la noche, mientras la temperatura disminuye… Y después se agrega un poco de presión social en forma de una oferta: Si tan solo cinco se rinden, el resto podrá aliviarse el resto de la noche junto al fuego y la comida (que por supuesto que presenta una tentación mediante el olfato).
Cuando los compañeros empezaron a caminar hacia fuera… De pronto una voz comenzó a cantar una tonada conocida, este simple acto bastó para hacer la diferencia. Y, aunque los instructores juraban tomar repercusiones si no se suspendía el canto colectivo, la canción seguía cada vez más fuerte.
Aquí hay dos valiosas lecciones:
- Nunca subestimes la forma en que un gesto, por sencillo/pequeño que sea, puede inspirar a los demás; y,
- Siempre motiva con el ejemplo.
Recuerda:
En algún momento, cada uno de nosotros nos encontraremos hundidos en lodo hasta el cuello. Ése es el momento de cantar a todo pulmón, de sonreír de oreja a oreja, de levantar a aquellos a tu alrededor e infundirles esperanzas de que el mañana será mejor.
Nunca toques la campana
Tocar la campana es la forma que tienen los aspirantes a SEAL de anunciar que se retiran del entrenamiento. Esto es, que han fracasado.
Pero, si no les gusta el dolor, si no les agrada el hostigamiento. Hay una manera fácil de evitarlo: Para rendirse, lo único que tienen que hacer es tocar la campana tres veces.
Instructor a los aspirantes SEAL en su primer día de entrenamiento
La lección de este capítulo es que Rendirse jamás facilita nada. Aunque yo me daré el gusto de cambiarla a “Si quieres hacer algo que valga la pena, debes aprender a no rendirte. Habrá sacrificios.”
CONCLUSIÓN: LA IMPORTANCIA DE TENDER TU CAMA
El lema da la Universidad de Texas es “Lo que aquí empieza cambia al mundo” (muy americano, claro). Pero bueno, al punto: La teoría de William McRaven es que si cada uno de nosotros cambia la vida de al menos diez personas y estas a su vez cambian la vida de otras diez, en solo unos cuantos años habremos cambiado al mundo.
Esta teoría (o más bien, su aplicación) no deja de recordarme un poco al argumento de la película Cadena de favores del año 2000. En que, Trevor, un niño de 11 años, decide llevar a cabo un experimento para su clase de ciencias sociales con la intención de mejorar el mundo bajo una simple premisa: Que él hará una serie de favores a tres personas y, a cambio, ellos le devolverán el favor haciendo algo para otras tres, y así sucesivamente. Solamente tenemos que cambiar el número a diez, un poco más ambicioso, ¿eh?
Lo que en cualquier caso resulta cierto es que el crecimiento de las acciones es exponencial antes que geométrico. Tal como queda demostrado en la representación gráfica siguiente:
Finalmente, estas son algunas acciones con las que puedes “cambiar el mundo”:
Recuerda…, empieza cada día con una tarea cumplida. Encuentra a alguien que te ayude a través de tu vida. Respeta a todo el mundo. Ten presente que la vida no es justa y que a menudo fracasaras. Si tomas algunos riesgos, si tomas la iniciativa cuando las cosas parecen estar en su peor momento, si te enfrentas a los bravucones, si animas a los oprimidos y nunca jamás te das por vencido si haces todas estas cosas, puedes cambiar tu vida para bien… ¡y quizá también al mundo!
William H. McCraven
Por cierto, y en caso de que tengas curiosidad, aquí te dejo el discurso original (con subtítulos al español) que dio pie a la creación de este libro:
MI OPINIÓN ACERCA DE TIENDE TU CAMA
Tiende tu cama me pareció un libro corto y bastante entretenido. Su lectura es simple y para nada muy elaborada, si bien contiene algunas reflexiones profundas. Es ese tipo de libro que te puedes leer en una sola sentada (al menos, así lo hice yo la primera vez que lo conocí).
Ahora, sí me presionas yo te diría que mires el vídeo. Realmente ahí está todo lo que necesitas (y casi todo lo que se dice en el libro). Quizá valdría la pena si tienes una afinidad a la lectura por encima de la visualización como herramienta de retención y aprendizaje (es mi caso). O si te ha interesado lo suficiente tras ver el vídeo como para ponerle nombre y apellido a cada suceso relacionado en el discurso.
Es decir, puedes verte el video de 20 minutos en YouTube (te lo dejé justo arriba) para oír la historia de primera mano, pero leyendo este resumen ya tienen los conceptos básicos de que trata.
Lo Malo de Tiende tu Cama
Uno de los fallos que tiene esta obra es que la redacción carece del nivel de emotividad que tiene el discurso del que emana dicho libro. Mismo que fue dado en la Universidad de Texas y viene transcrito al final del libro. Otra cuestión que decepciona francamente es que el libro no aporta nada nuevo al tema, sirve únicamente como complemento de corte autobiográfico a la charla antes mencionada, no más.
Seamos honestos. La verdad es que no hay nada nuevo en el libro (respecto de lo mostrado en el vídeo o de la literatura en general), pero sus ejemplos son tan vívidos que es posible entender porque logran ser tan impactantes y porque puede llevar el mensaje que muchos otros libros también dicen pero de una manera más aburrida.
Ahora, si alguien te ha dicho que este es un libro de hábitos… ¡Pues te han mentido! Lo cierto es que aunque el título parece invitar a esa conclusión respecto de su contenido, en ningún momento brinda alguna herramienta sobre cómo desarrollar los hábitos relacionados en cada capítulo. Es más bien de corte meramente descriptivo (sin que esto signifique que sea malo).
En términos generales, también podemos observar que se trata de un listado de los conceptos más comúnmente abordados en el mundo de la autoayuda (aunque desde un enfoque de preparación militar). Lo cual no es malo, pero si o eres fan del género, entonces…
Lo Bueno de Tiende tu Cama
Uno de los grandes aciertos que tiene McRaven es que, sin saberlo de forma técnica, logra ilustrar los conceptos y filosofía de formación de los SEALS a través de las historias. Esto convierte al libro en una propuesta por demás interesante.
Otro punto fuerte del libro es que cada capítulo comienza con claridad respecto del concepto de mejora personal que busca ejemplificar/abordar. Lo cual da claridad al progreso que vamos llevando en la lectura. Adicionalmente, los conceptos son interdependientes, por lo que puedes concentrarte en aquellos que son de tu interés, dejando de lado los demás sin enfrentar mayores consecuencias.
Algo más que también me ha gustado del libro es que nos muestra el poder de las pequeñas acciones en el largo plazo. Parte de una filosofía que nos lleva de lo micro a lo macro, nos expresa cómo tender nuestra cama puede -y debe- ser el comienzo de un gran día. Esto último es especialmente importante puesto que tendemos a subestimar el resultado de pequeñas acciones en un lapso de tiempo largo; mientras que, al revés, sobrestimamos los resultados de acciones grandes en pequeños periodos de tiempo.
Entiende que, sencillamente, la vida no funciona así. La Disciplina, la Constancia, el Coraje, la Humildad, el Trabajo en Equipo, siempre vencerán. Todas ellas cualidades resaltadas de manera enfática a lo largo de las páginas del libro Tiende tu cama.
Otro punto fuerte del libro es que es muy corto y se puede leer seguro en un viaje corto (de menos de dos horas de duración). Esto ayuda a que no se convierta en una lectura tediosa. Algo que el autor tuvo en claro pues no divaga en exceso y suele ir al punto de forma directa.
Al final, es posible que no se trate del libro más completo ni original. De hecho, recuerda más a una mezcla extraña -extrañamente funcional– entre libro con temas de autoayuda, filosofía, métodos de aprendizaje y un toque de productividad. Sin que esto signifique una mezcla sinsentido o una pérdida de su objetivo principal.
En definitiva es un libro que recomiendo leer, aunque sea una sola vez en la vida. Pues muchas de sus historias reflejan conceptos esenciales para mantener virtudes básicas para la vida como lo son la Disciplina, la Constancia, el Coraje y la Reciprocidad, entre otras más.
OPINIONES EN AMAZON DE TIENDE TU CAMA
Independientemente de mi criterio y opinión (antes plasmados), las opiniones en Amazon de este libro son muy buenas, de hecho poco más que 4 de cada 5 lectores (es decir, una aplastante mayoría) le da 5 estrellas, como puedes ver en la imagen.
Este es un buen libro que puede ayudarte a entender mejor la forma en que la disciplina, constancia y coraje forman a los cuerpos de élite militares pero pueden impactar en tu vida sin que lo seas.
Encuentro especialmente útiles algunos capítulos que se centran en temas filosóficos y motivacionales para los tiempos que se están viviendo en estos momentos…
Por cierto, el libro se complementa con un diario (si te interesa, lo puedes adquirir aquí)
Más Artículos Relacionados
Espero que te haya gustado este resumen con las ideas principales del libro Tiende tu cama y otros pequeños hábitos que cambiarán tu vida y el mundo de William H. McRaven.
Si quieres seguir aprendiendo sobre finanzas e inversión, te recomiendo los siguientes artículos de mi página web:
- ¿Cómo gestionar tu riesgo al invertir?
- ¿Cómo ganar un millón de pesos?
- 6 Cosas que debes hacer ANTES de Invertir
- Interés Compuesto: Cómo funciona y dónde obtenerlo en México
- Consejos de Inversión para Principiantes
También podrás leer algunos otros libros que previamente he resumido en la sección Análisis de Lectura, entre los que se encuentran los siguientes:
- El Hombre más rico de Babilonia
- Your Life or your Money (1/2)
- Los Axiomas de Zurich
- El Cuadrante del Flujo de Dinero
- Un Paso por delante de Wall Street
- Más libros PRÓXIMAMENTE
Si te interesa conocer más opciones de lectura tratándose del tema de la inversión, también puedes revisar este artículo de aquí.
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